Sí, lo has leído bien.
La vulnerabilidad es un poder que no nos permitimos expresar y bloquea nuestra vida, éxito, abundancia y felicidad.
La vulnerabilidad, está basada en nuestras conexiones con los demás, en cómo funcionan nuestras relaciones.
La conexión, da sentido y finalidad a nuestra vida y nos ha permitido evolucionar hasta el día de hoy.
Cuando no la aceptas, se muestran la vergüenza, el miedo al rechazo y a no ser suficiente.
“Existe algo en mí, que si se muestra y lo saben o lo ven, no voy a ser merecedora de conexión o de ser aceptada”.
Por el contrario, quienes aceptan la vulnerabilidad, tienen un sentido fuerte de amor y pertenencia, son personas genuinas, entusiastas, sinceras, con un profundo sentido de la dignidad, el coraje y consiguen todo aquello que desean en su vida.
Son personas amables, primero con ellas mismas y después con los demás, expresan compasión.
La conexión, es la parte más difícil de la relación, porque es el resultado, de nuestra autenticidad.
Cuando “eres tú”, aceptas la vulnerabilidad y, sueltas el control y las expectativas del resultado.
Cuando no queremos sentir, nos insensibilizamos y “apagamos” la emoción, porque no “queremos sentir dolor” y culpamos a los demás.
«La culpa es una forma de aliviar el dolor y la incomodidad de una relación o situación».
Y es entonces cuando nos evadimos, cuando caemos en hábitos y comportamientos adictivos, que bloquean nuestra vida, a todo nivel.
Cuando sabes quien eres, cuando estás conectada con tu esencia, sabes perfectamente que:
Las cosas no son buenas, ni malas, simplemente “SON” y de ti depende, ver aquello que te molesta, desde una percepción distinta, desde otro lugar y aprender.
¿Estás dispuesta?
Cuéntame :
- ¿Qué es para ti, la vulnerabilidad?
- ¿Qué te hace sentir vulnerable, qué hay en tu vida que no te gusta?
Un abrazo.